El juez de la localidad sanjuanina de Jáchal, Pablo Oritja, que investiga el derrame de una solución cianurada a los ríos de la región, imputó a Leandro Poblete, jefe de Procesos de la mina Veladero, a quien acusó de "contaminar el agua de manera negligente".
Poblete fue el primero de los investigados en declarar ayer ante el magistrado de la Segunda Circunscripción Judicial provincial, como presunto infractor del artículo 56 de la Ley 24.051, que contempla penas de hasta dos años de prisión. Oritja siguió hoy tomando declaración a otros empleados de la mina, que explota la canadiense Barrick Gold.
El juez constató que Poblete fue uno de los que firmaron el acta de apertura de la compuerta del canal del Norte, que fue por donde se filtró la solución cianurada hacia los cauces de agua, en lugar de terminar en las piletas de contingencia, tras romperse la válvula de la cañería que transportaba el líquido. Esta situación provocó que se derramara hacia los ríos al menos un millón de litros de solución cianurada, según admitió la propia empresa.
El empleado de Barrick imputado habría explicado ante el magistrado que se decidió abrir la compuerta para que el agua de deshielo que venía trasladando el canal desde principios de septiembre fuera al río Potrerillos y no a las piletas de contingencia. De esta forma, se pretendió evitar que se congelara en esas piletas, ocupando un espacio necesario para una emergencia. Sin embargo, al producirse el derrame, la compuerta abierta dejó pasar el liquido tóxico al río.
Por otra parte, debía declarar también ayer Segundo Álvarez, subjefe de Proceso, pero se abstuvo de hacerlo. Durante las jornadas de hoy y mañana fueron convocados a declaración indagatoria Carlos Cabanilla, gerente de Minas de la empresa; Ángel Escudero, gerente de Prevención de Riesgos; Osvaldo Brocca, supervisor de Servicios Técnicos; José Sánchez, supervisor de la Gerencia de Mantenimiento; Ricardo Cortez, supervisor de Medio Ambiente; Walter Pizarro, gerente de Procesos; y Antonio Adames, gerente general.